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Para nadie es un secreto que Dios le delego al hombre la cabeza de cada familia, pero para muchos no es usual que se respete esto. Para poder definir la importancia del hombre de Dios en casa tenemos que definir un termino que va de la mano de el sacerdocio del hombre, y es gobernar. Literalmente esta palabra significa presidir o dirigir, ampliando esta definicion encontramos:
Un buen administrador sabe cómo hacer que otros trabajen. Se preocupa por no desconocer o reprimir las habilidades de su esposa. Más bien, las aprovecha al máximo. No la considera como alguien a quién mandar. En cambio, piensa en ella como en una maravillosa, útil y positiva bendición de Dios.
Un administrador tiene el ojo puesto en todo lo que ocurre en la casa, pero no hace todas las cosas él mismo. En lugar de eso, mantiene la visión general y conserva todo bajo control. Sabe lo que ocurre, como está llevándose a cabo y solo cuando resulta necesario interviene para cambiar, modificar o ayudar en alguna manera.
Da orden y respaldo al plan que Dios tiene con cada familia - Trae la disciplina de Dios en la casa y lleva a los hijos por el buen camino
- Toma la ultima decision de las cosas mas importantes de la casa
- Provee el alimento basico nutritivo y tambien el alimento espiritual para la casa de acuerdo al plan de Dios para ese hogar
- Desarrolla los dones y talentos de sus hijos y da soporte y estabilidad a la mujer
- Redirecciona a la familia en caso de extravio
- Posibilita la unidad EN LA FAMILIA, da orden y direccion a todas las inversiones y gastos de la casa
El hombre de Dios debe Gobernar bien la casa y tener los hijos y a la esposa en sujeción, a Dios dice la Biblia.